¿Chicha y limonada en la política boliviana? Se diluyen las ideologías en nuevas alianzas electorales

En el panorama político boliviano, los principios ideológicos parecen desvanecerse ante la creciente tendencia de formar alianzas entre actores de corrientes tradicionalmente opuestas.
Tal es el caso del alcalde de Santa Cruz de la Sierra, Jhonny Fernández, quien ha manifestado su intención de conformar una nueva alianza con figuras como Eva Copa, Félix Patzi y Andrónico Rodríguez, cada uno con antecedentes y posturas muy diferentes en relación al Movimiento al Socialismo (MAS) y al expresidente Evo Morales.
Jhonny Fernández, quien en el pasado se mostró crítico del gobierno del MAS, ha sido señalado por sus posturas ambiguas y su cercanía con el oficialismo en temas clave. Ahora, su intención de unir fuerzas con Eva Copa —exsenadora del MAS hoy alcaldesa de El Alto con perfil propio—, Félix Patzi —exgobernador paceño que se distanció del masismo—, y Andrónico Rodríguez —actual senador y firme defensor de Evo Morales—, plantea serias interrogantes sobre la coherencia política en el país.
Para muchos analistas, esta aparente «mezcla de chicha y limonada» refleja una política de conveniencia antes que de convicción. Las alianzas ya no responden a programas o ideologías, sino a cálculos estratégicos con miras a las elecciones generales de 2025.
“El pragmatismo ha reemplazado a la doctrina. Hoy los pactos responden más al interés de asegurar cuotas de poder que a un verdadero proyecto de país”, opinó un politólogo consultado por este medio.
Esta tendencia genera preocupación en sectores de la ciudadanía que demandan coherencia y claridad ideológica en sus representantes. También deja en evidencia una crisis en el sistema de partidos, donde los liderazgos se construyen sobre la imagen y no sobre las ideas.
A medida que se acercan los comicios, se prevé que esta dinámica continúe, con más acercamientos inesperados y reconfiguraciones políticas que podrían reescribir el mapa electoral del país.